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¿Cómo elegir la silla de comer correcta para mi bebé?

Si tu bebé está a punto de comenzar la etapa de alimentación complementaria, ¡entonces es hora de usar la silla de comer!  Pero, ¿cómo elegir la correcta?

¿Es importante que tenga una silla?

La respuesta es sí, es muy importante. Así se irá programando que hay un espacio  y un momento del día donde se ingieren los alimentos, además que ayudará a que empiece a relacionar ese comento dentro de sus rutinas.

¿Mi bebé está listo para una silla alta?

Es importante tener en cuenta que la silla de comer se usa sólo desde que tu bebé es capaz de sentarse por sí solo, es decir, que ya sostiene con firmeza su cuerpo y cabeza o es capaz de sostenerse sentado con mínimo apoyo, esto empieza alrededor de los 6 meses de edad. Que es justo la edad en la que empezamos la alimentación complementaria.

¿Qué características debo buscar en una silla alta?

Estabilidad: 

Fíjate en la estructura material de la silla, pueden ser de madera o plásticas pero que sean firmes y resistentes para sostener a tu pequeño. Siempre fíjate que el tamaño de la base de la silla de comer sea mayor a la parte superior, así evitarás que tu bebé se vuelque por falta de estabilidad. 

Lo ideal es elegir una silla alta que no tenga ruedas. Una vez que tu bebé está sobre ella, puede desplazarse y causar accidentes. Dado el caso que tenga ruedas ¡entonces procura que tenga frenos!

Posicionamiento adecuado:

Elige una silla alta que tenga un buen soporte en los pies. El apoyo en los pies de tu bebé le dará más seguridad y estabilidad. Algunas sillas carecen de un reposapiés y los pies de tu bebé quedan colgando en el aire. Esto elimina un elemento de estabilidad para tu bebé y hará que se le haga más difícil comer independientemente y sentirse cómodo.

Asegúrate que el respaldo de tu bebe quede derecho y no reclinado. Algunas sillas tienen respaldos reclinables que presentan un riesgo de asfixia para tu bebé. Sin mencionar que les resultará difícil ver la comida en su bandeja, explorar los alimentos, y comer de forma independiente. Al igual que tener un respaldo recto y un soporte adecuado para los pies, queremos asegurar que las rodillas de tu bebé estén flexionadas a 90º. Esto le permitirá a tu bebé mantener el equilibrio, encontrar apoyo y estabilidad fácilmente mientras come. Deseamos que  tu bebé pueda cambiar su punto de apoyo cómodamente.

También queremos asegurarnos que los codos de tu bebé queden colocados encima de su bandeja. Cuando la mesa de la silla está más alta que el nivel de sus codos, tienen problemas para comer de forma independiente, dificultad para interactuar bien con los alimentos, pierden estabilidad, y no es cómodo.

Seguridad:

Opta por sillas que tengan sus bordes redondeados y terminaciones suaves, así protegerás a tu pequeño de cortes o golpes con esquinas.

Para mayor seguridad de tu bebé, los padres deben situarse siempre a su alcance y no dejar a un bebé desatendido mientras está sentado en la silla alta. Tu bebé puede atragantarse mientras come, o puede caerse de su silla alta, siempre se requiere supervisión por un adulto durante los tiempos de comida. 

Adaptable:

Elige una silla alta con una bandeja extraíble. Este diseño permite colocar la silla directamente contra la mesa familiar. Al sentar a tu bebé con todos en la mesa familiar, fomentas que crezca el importante vínculo que se produce durante las comidas, y el niño desarrolla sus capacidades sociales. Sin mencionar que es un gran momento para que tu bebé aprenda a comer, masticar y disfrutar de los alimentos al observar a todos en la mesa comiendo. 

¡Tu espacio en casa también es importante! En el mercado podemos encontrar una gran variedad de sillas, pero debes considerar de cuánto espacio dispones para tener la silla sin entorpecer el flujo en tu hogar.

Fácil de limpiar: 

Elegir una silla con un material y diseño fácil de limpiar, te será de gran ayuda para mantenerla en perfectas condiciones por mucho más tiempo.

Comodidad:

Lo más importante es que tu hijo esté cómodo, estable, seguro y feliz en su silla alta. Siempre queremos que nuestro bebé asocie las horas de la comida con sensaciones agradables. Una silla cómoda, un marco estable que les da la confianza para explorar y comer de forma independiente, un momento familiar feliz, comidas deliciosas y una divertida aventura sensorial.  Estas asociaciones positivas creadas en sus sillas altas asegurará que tengas un comedor feliz a medida que crezca.

Escrito por: Dra. Diana Jimenez, pediatra especializada en nutrición infantil, lactancia materna y desarrollo infantil.

hace 1 año